Blogia
Entre curva y curva (reflexiones de un viajante)

Una lección de moral

El otro día fuimos en familia a "disputar" una carrera popular en Jerez. La llamada carrera de la fruta pues al concluir además de la camiseta conmemorativa que suele ser lo habitual, regala una bolsa con fruta (que cae divino después de los casi 10 kms.)

Mi niño estaba jugando con un maletín de médicos que le habíamos regalado y en un momento dado sacó la jeringuilla y se me ocurrió decirle:

- ¡Venga hijo, ponme una inyección de supervitaminas para ganar la carrera!

Él me mira a los ojos muy serio y me contesta:

- No papi. Eso sería hacer trampas y eso no vale.

Yo tronchado de la risa por dentro, no me quedó otra que muy seriamente decirle que llevaba la razón.

Toda una lección de moral de un pequeñín de cuatro años y medio.

 

1 comentario

Ana Mari -

Joe, si es que tengo un sobrino que es más listo que el hambre. A ver a quien ha salido jajaja (es broma, que los padres también son listos en?). Un besito para los tres, bueeeeeeno, mejor uno para cada uno.